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Momijigari en Japón: la tradición de contemplar el otoño

El momijigari (紅葉狩り) es una tradición de Japón que consiste en contemplar los colores del otoño y cómo estos conforman un paisaje de una belleza única. Tiene lugar en octubre, noviembre y diciembre en Japón y es uno de los principales atractivos del país durante esta época.

¿Qué significa el momijigari en Japón?

El nombre de esta costumbre está compuesto por dos palabras: momiji (紅葉), también pronunciado como kōyō, que hace referencia a las hojas rojizas de los árboles en otoño; y gari (狩り), que viene del verbo «cazar». En esta temporada, los japoneses suelen salir a visitar templos, santuarios y paisajes naturales famosos por sus árboles caducifolios, que se vuelven de colores rojizos, amarillentos y anaranjados. En otras palabras, salen «a la caza» de las vistas otoñales.

La belleza de este acontecimiento no es puramente estética, también representa un momento espiritual y simbólico ligado al concepto budista de que la vida es, en efecto, efímera.

En el período Heian (794-1185), el momijigari era una tradición muy extendida entre la clase noble. De esto habla el Man’yoshu (万葉集), la antología japonesa más antigua que se conoce, o el Genji Monogatari (源氏物語), considerada la primera novela de la historia. Aunque existen varias teorías, es posible que el nombre se estableciera en esta época, ya que desplazarse a pie no era considerado un comportamiento digno de un noble, pero, en cambio, salir a cazar sí que estaba bien visto. Con esta excusa, los aristócratas salían a caminar y contemplar las hojas del otoño. Más adelante, en la era Meiji (1867-1912), se propagó la costumbre entre las clases más populares, y así hasta el día de hoy.

Los colores y las cuatro estaciones de Japón

Las variedades de árboles más destacables en la época del momiji son el arce japonés, cuyas hojas adoptan un característico color rojo y naranja, y el ginkgo, que se vuelve de un amarillo vistoso. El momijigari es un acontecimiento que rivaliza, tanto en belleza como en popularidad, con el hanami (花見, contemplación de los cerezos en flor) en primavera, lo cual atrae miles de turistas al año durante esta temporada. Para la ocasión, muchos templos y jardines abren sus puertas en horario nocturno para poder observar las hojas de los árboles con iluminaciones especiales.

Puede que alguna vez hayas oído decir que «Japón tiene cuatro estaciones» y te haya resultado un tanto extraño, ya que existen muchos países en los que este es el caso, ¿verdad? Más que referirse a las condiciones climáticas, a lo que alude esta expresión es a la gran distinción que muestran las escenas naturales japonesas en cada estación del año. En invierno, la nieve lo cubre todo en muchas zonas; en primavera, se disfruta de la belleza de las flores; en verano, la temporada de lluvias saca el verde más espléndido de la vegetación y, en otoño, las hojas de los árboles llenan de color el paisaje. Y tú, ¿en qué estación prefieres visitar Japón?